miércoles, 14 de octubre de 2009

La censura en El Tiempo

A propósito de los móviles que tuvo la Casa Editorial El Tiempo para guillotinar a una de sus colaboradoras más prestigioscas y más leidas, Claudia López (foto), reconocida periodista e investigadora de la Fundación Arco Iris, algunos creen con discutible lógica que "uno no puede darle patadas a la lonchera", esto para significar que no se debe jugar con el sustento, sobre todo cuando éste depende de un patrono implacable. Por suerte, desde otras ópticas del auditorio se escuchan voces de exaltación a la valentía de la periodista en cuanto a que imperó su compromiso ético con la verdad y con el derecho inalienable la libertad de expresión, precisamente por cuestionar al poder desde el corazón del mismo.

El texto de la columna que dio lugar a su salida fulminante del diario es el siguiente:

Reflexiones sobre un escándalo

"Se preguntaba Rudolf Hommes en su columna de la semana pasada por qué unos temas se vuelven escándalos y otros no. Sugería que se requiere que el grueso del público tome conciencia y que haya un instigador. El cubrimiento que El Tiempo le dio al escándalo de Agro Ingreso Seguro (AIS) ofrece una oportunidad para reflexionar al respecto.

"A diferencia de los demás medios escritos, El Tiempo no profundizó sobre el programa AIS sino sobre los efectos políticos del escándalo. Tomar ese ángulo era una decisión periodística válida dado que sus socios de la revista Cambio ya habían hecho el resto del trabajo. Sin embargo, más que un cubrimiento, lo que hizo El Tiempo fue una fabricación inducida para apoyar su interpretación deseada de los efectos políticos del escándalo.

"La fabricación sesgada empezó con una pregunta en un foro en el tiempo.com, siguió con una nota que destacaba lo dicho por los foristas y concluyó con un supuesto artículo de análisis. En el foro se indagó a los foristas si creían que Arias debía renunciar por el escándalo de AIS (Agro Ingreso Seguro). No sobra recordar que a El Tiempo nunca se le ocurrió preguntarles a sus foristas si Juan Manuel Santos debía renunciar por el escándalo de los 'falsos positivos'. En el caso de Arias sí se le ocurrió. Culminado el foro, publicaron una nota titulada 'Indignación y rechazo genera Andrés F. Arias por caso de Agro Ingreso entre lectores de eltiempo.com', en la que destacaban que "la mayoría de usuarios le pide al ex ministro que renuncie a su precandidatura" y que "hubo muy pocos que defendieron a Arias". Luego del foro inducido y la nota destacada, remataron con un artículo cuyo título sentenciaba: 'Andrés Felipe Arias sale debilitado y Juan Manuel Santos logra ventaja en medio del escándalo de AIS'.

"Es obvio que Arias sale debilitado, pero no es nada obvio que la consecuencia sea que Santos "logra ventaja". El Tiempo asegura que el traspié de Arias "llevó a Juan Manuel Santos a convertirse en un ganador neto esta semana". ¿De dónde saca El Tiempo que el espacio perdido por Arias fue ganado por Santos? ¿Hicieron una encuesta? No, pero a falta de encuesta el periódico usó su foro para lanzar la pregunta, inducir la respuesta y construir de allí sus conclusiones.

"Aunque Arias no está compitiendo con Santos, sino con Noemí dentro de la consulta conservadora, el supuesto análisis ni siquiera menciona que una de las posibles ganadoras del desliz de Arias es Noemí. Además, el análisis se inventa un hecho para reforzar su argumento. Afirma que una de las razones por las cuales el fortalecido es Santos es que "los conservadores, además, tienen que someterse a una consulta interna para buscar su candidato, mientras 'la U' ya lo tiene: Santos". 'La U' no ha escogido candidato presidencial. Lo único que le han ofrecido a Santos en la U es la jefatura del partido, no la candidatura presidencial. 'La U' es el promotor del referendo reeleccionista y si es aprobado es de esperarse que sea Uribe, no Santos, el candidato presidencial de 'la U'. Supongo que esos hechos dañaban el "enfoque del análisis" y por eso fueron desechados.

"No será fácil que Noemí merezca el respaldo de Uribe, después de que ella lo ha acusado de 'comprar' el referendo y amenazado con 'derrotarlo' en las urnas." Esta frase, casi transcrita de declaraciones de Santos, trata de presentar como periodística la versión de Santos de que él, a diferencia de Noemí, no es un traidor ni quiere derrotar a Uribe. Cualquiera que conozca medianamente la carrera de Santos sabe que cambiar de bando ha sido la constante de su ascenso político, al igual que de Noemí, y cualquiera entiende que ambos quieren suceder a Uribe; sólo que Santos quiere hacerlo sin que parezca una traición, agrego yo.

"La calidad periodística de El Tiempo está cada vez más comprometida por el creciente conflicto de interés entre sus propósitos comerciales (ganarse el tercer canal) y políticos (cubrir al Gobierno que otorga el canal y a su socio en campaña) y sus deberes periodísticos. Este tipo de cubrimientos sesgados en nada contribuyen a resolver periodísticamente ese conflicto; lo único que logran es evidenciarlo".

A continuación del texto anterior, las directivas del diario formularon la siguiente glosa:

N. de la D.: EL TIEMPO rechaza por falsas, malintencionadas y calumniosas las afirmaciones de Claudia López. La Dirección de este diario entiende su descalificación de nuestro trabajo periodístico como una carta de renuncia, que acepta de manera inmediata.

lunes, 12 de octubre de 2009

Cuba bloquea a Yoani Sánchez

LA HABANA, octubre 12 de 2009 (AP). - La bloguera cubana Yoani Sánchez no recibió el lunes el permiso de Cuba para viajar a Estados Unidos a la entrega del premio María Moors Cabot, el más antiguo del periodismo internacional.

"La oficina de inmigración me acaba de confirmar que se mantiene la prohibición de que yo pueda salir del país" escribió Sánchez en su blog "Generación Y".

El esposo de Sánchez, Rolando escobar, dijo a la AP que la joven galardonada agregó la noticia en su blog el lunes en la mañana tras salir de la oficina de inmigración de la ciudad de La Habana, donde acudió para realizar los trámites de viaje.

La Universidad de Columbia, que maneja el premio, hizo una mención especial a Sánchez en lo que resultó el primer reconocimiento que hace al mundo de los blogs.

Sánchez abrió "una nueva ventana para que los cubanos miren hacia afuera y para que el resto del mundo mire hacia Cuba", señaló Josh Friedman, director del prestigioso galardón cuando se dio a conocer el galardón.

Con su blog Generación Y, creado en abril del 2007, Sánchez expone la vida diaria de los cubanos a través de observaciones personales e intenso análisis, dijo en un comunicado la universidad.

De acuerdo a la información de Escobar, la bloguera cubana recibió varias invitaciones para visitar otros países, como Brasil a donde tampoco podrá viajar.

"En unos días se presenta mi libro en Brasil y yo aquí, condenada a no poder salir... bueno, al menos que mi voz llegue hasta allí" comentó Sánchez en su blog en días pasados.

Sánchez, de 34 años y licenciada en filología, tampoco recibió en el 2008, el permiso de las autoridades de la isla para recibir el premio Ortega y Gasset al periodismo digital que se le otorgó en España.

El columnista brasileño Merval Pereira, del diario O'Globo, y los estadounidenses Anthony DePalma, corresponsal del New York Times, y Christopher Hawley, de los diarios USA Today y The Arizona Republic, son los ganadores del premio Cabot 2009.

El premio, creado en 1938, se otorga cada año a quienes destacan en su cobertura de América Latina y el Caribe.

lunes, 28 de septiembre de 2009

Honduras: Clausurada radio opositora

Un policía hondureño custodia la entrada principal del canal 36 Cholusat hoy, 28 de septiembre de 2009, en Tegucigalpa (Honduras), luego de que el presidente interino Roberto Micheletti mediante un decreto gubernamental ordenara el cierre de este y otros medios. EFE / Ulises Rodríguez
Un policía hondureño decomisa uno de los equipos de transmisión de la emisora Radio Globo hoy, 28 de septiembre de 2009, en Tegucigalpa (Honduras), luego de que el presidente interino Roberto Micheletti mediante un decreto gubernamental ordenara el cierre de este y otros medios. EFE / Ulises Rodríguez

TEGUCIGALPA, Honduras, septiembre 28 de 2009. (AFP) - El gobierno de facto de Honduras clausuró este lunes la radioemisora Globo de Tegucigalpa, uno de los últimos medios opositores al régimen que funcionaban en el país, tras un decreto que restringe las libertades públicas dado a conocer el domingo, constató la AFP.

El canal de televisión 36, que también mantenía una línea opositora, se encontraba la mañana del lunes rodeado por militares y la señal estaba fuera del aire, aunque no se confirmó si las instalaciones fueron tomadas.

Una veintena de policías antimotines y militares tomaron el edificio en que se encuentra alojada Radio Globo, a eso de las 05H30 locales (11H30 GMT) y sacaron la señal del aire, sin que encontraran resistencia, dijo a la AFP el periodista Carlos Paz, que labora en ese medio de comunicación.

Paz agregó que hasta el momento no se había logrado localizar telefónicamente al director de la radio, David Romero.

Luego del ingreso, los policías comenzaron a retirar materiales y equipos del edificio de la emisora, ubicado en el céntrico Boulevard Morazán.

"Han desmantelado la radio, han desmantelado la Constitución de la República", dijo Andrés Pavón, presidente del Comité para la Defensa de los Derechos Humanos de Honduras (CODEH). "Es una agresión total, estamos frente a un régimen militar", agregó.

Radio Globo ya había sido cerrada por el régimen los primeros dos días tras el golpe de Estado que depuso al presidente constitucional Manuel Zelaya, el pasado 28 de junio.

La noche del domingo, el gobierno de facto oficializó un decreto que restringe la libertades públicas con el propósito de contrarrestar las actividades del movimiento que busca el retorno de Zelaya a la Presidencia.

Zelaya regresó hace ocho días al país en forma secreta y se refugió en la embajada de Brasil, que permanece sitiada por centenares de soldados y policías.

Entre otras medidas, el decreto autoriza "impedir la emisión por cualquier medio hablado escrito o televisado, de manifestaciones que atenten contra la paz y el orden público", o que "atenten contra la dignidad humana de los funcionarios públicos o las decisiones gubernamentales.

En principio, el gobierno había dicho que el decreto debía ser ratificado por el Congreso. Las medidas tendrían una vigencia de 45 días a partir de su aprobación legislativa, de conformidad con el informe oficial.

Francia denunció los "graves atentados" contra las garantías constitucionales y las libertades en Honduras, según un comunicado divulgado el lunes por el Quai d'Orsay, sede de la cancillería francesa.

Francia, que "sigue con clara preocupación" la evolución de la situación política en el país centroamericano, "denuncia los nuevos y graves atentados generados, por decreto del 26 de septiembre de las autoridades de facto, a las garantías constitucionales, especialmente las libertades de movimiento, de reunión y de información".

París también lamentó la expulsión de la misión preparatoria de la Organización de Estados Americanos (OEA), que debía "abrir la vía a un nuevo esfuerzo de mediación", indica el comunicado.

Una periodista de pantalones

JARTUM, Sudán, 7 de septiembre de 2009. (EFE). Una periodista sudanesa fue condenada el 7 de septiembre por "vestirse de manera provocativa" y encarcelada por usar pantalones, informan la Red Árabe por la Información de Derechos Humanos (ANHRI) y el International Press Institute (Instituto Internacional de Prensa, IPI).

Los manifestantes que apoyaban a Lubna Ahmed Hussein fueron golpeados en el exterior del tribunal y se expulsó a los reporteros de la sesión. Se dio a Hussein la opción de pagar una multa de USD 250, a lo que se negó, y prefirió en su lugar ir a la cárcel un mes para continuar su campaña por los derechos de la mujer.

Sin embargo, fue liberada después de que el Sindicato Sudanés de Periodistas, un miembro del partido gobernante, informó a la BBC que había pagado su multa. La periodista fue arrestada en julio con otras 12 mujeres que también estaban usando pantalones en un restaurante, dijeron la ANHRI, el IPI y el Comité de Mujeres Escritoras de PEN Internacional.

Se había enfrentado a una pena de 40 azotes varias de las mujeres se declararon culpables y se les dieron 10 azotes inmediatamente. Según el IPI y ARTICLE 19. renunció a su trabajo en la ONU, que le habría dado inmunidad, para poner un ejemplo de su propio caso, y argumentó durante el juicio que no había hecho nada malo.

Durante años Hussein ha estado escribiendo su famosa columna "Charla de hombres" en los periódicos sudaneses, y ella y otras mujeres han estado usando su caso para atraer la atención a las leyes arcaicas que persiguen a las mujeres.

La columnista Amal Habbani fue acusada de difamar a la policía por una noticia publicada el 12 de julio titulada "Lubna… un caso de sojuzgamiento del cuerpo de una mujer", informa el IPI. De ser condenada, tendría que pagar una enorme multa.

Los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes ocurrieron fuera del tribunal, informa la ANHRI, y casi 50 mujeres que protestaban en favor de Hussein fueron arrestadas.

"Las mujeres fueron acosadas y golpeadas por las fuerzas policíacas", dice la ANHRI. La mayor parte de las mujeres arrestadas eran reporteras, abogadas y activistas de derechos humanos. La policía además disparó gas lacrimógeno contra la multitud, informa el Programa Árabe para Activistas de Derechos Humanos (APHRA). Una de las mujeres golpeadas sufrió una grave lesión en la cabeza.
IFEX - Intercambio Internacional por la Libertad de Expresión

Libre tras el zapatazo a Bush

BAGDAD, 15 de septiembre de 2009 (AFP). El periodista iraquí Muntazer Al Zaidi, preso por haber lanzado en diciembre de 2008 sus zapatos contra el entonces presidente de Estados Unidos, George W. Bush, recobró su libertad este martes y acusó a sus carceleros de haberlo torturado.

Condenado a un año de prisión, el periodista, considerado como un héroe por muchos en el mundo árabe, pero criticado por otros en Irak por su gesto, fue liberado el martes "por buena conducta" y al cabo de nueve meses.

A la salida de la cárcel fue acogido por su antiguos colegas y una pequeña orquesta y para celebrarlo se degollaron varios corderos.

"En momentos en que el primer ministro, Nuri Al Maliki, afirmaba a las cadenas de televisión que no dormiría hasta que tuviese garantías de mi suerte (...) a mí me torturaban de la peor de las maneras, golpeándome con cables eléctricos y barras de hierro", afirmó el periodista poco después de salir libre.

Al Zaidi hizo estas declaraciones durante una rueda de prensa en los locales de la cadena de televisión Al Baghdadia, donde trabajaba antes de su gesto y su condena.

"Me abandonaron en un lugar donde no estaba protegido del frío", agregó, asegurando que sus carceleros utilizaron los ahogos simulados, una técnica empleada por la CIA estadounidense con los sospechosos tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.

"Le pido (al primer ministro Nuri Al Maliki) que presente sus excusas por haber ocultado la verdad", insistió.

Muntazer Al Zaidi justificó su gesto contra Bush afirmando que había querido "vengar" a las víctimas de la guerra en Irak, pero se negó a ser considerado "un héroe".

"La oportunidad se presentó y no la dejé pasar. Lo que quería al lanzar mis zapatos al rostro del criminal Bush era expresar mi rechazo a sus mentiras y a la ocupación de mi país", añadió, estimando que Irak seguía siendo "cautivo" de los estadounidenses.

Sin descartar totalmente que reanude su trabajo de periodista con la cadena de televisión iraquí, afirmó que deseaba ayudar a las viudas y a los huérfanos, víctimas de la guerra en Irak.

Según su familia, debe viajar rápidamente a Grecia para exámenes médicos y curarse de frecuentes dolores de cabeza, los que serían provocados por "productos químicos desconocidos" que le inyectaron durante su detención.

Hazem Al Araji, uno de los jefes del movimiento antiocupación de Moqtada Sadr, elogió "al periodista héroe, cuyo acto representó el sufrimiento de los hijos y las viudas iraquíes".

Al Zaidi, de 30 años, saltó a la fama el 14 de diciembre de 2008 cuando lanzó sus dos zapatos a la cabeza de Bush durante una rueda de prensa en Bagad. El ex presidente realizaba su última visita al país que sus tropas invadieron en 2003.

Condenado en primera instancia a tres años de prisión por "agresión contra un jefe de Estado en visita oficial", su pena fue reducida a un año en apelación. Gracias a su buena conducta en la cárcel se le permitió salir al cabo de nueve meses.

Al conocerse la noticia, las hermanas del periodista se encontraban en su pequeño apartamento de dos habitaciones en el centro de Bagdad, desde donde lanzaron gritos de alegría y empezaron a bailar y dar palmas, según un periodista de la AFP en el lugar.

El abogado de al Zaidi se felicitó por la liberación y rindió homenaje a la independencia de la justicia iraquí. "Esta decisión prueba que la justicia es honesta, independiente y que no está sometida a ninguna presión interior o exterior", precisó Dia al Saadi.

La liberación de Muntazer al Zaida estaba prevista para el lunes, según su familia, pero se retrasó por motivos administrativos.
Por Salam Faraj

lunes, 21 de septiembre de 2009

Adiós a Manuel H.

BOGOTA, septiembre 18 de 2009. "El reportero gráfico debe renunciar, asiduamente, a ciertas satisfacciones de índole familiar o social en aras de cumplir su misión periodística".

Este fue, quizás, el lema que dominó la vida del fotógrafo Manuel Humberto Rodríguez, mejor conocido como Manuel H, quien falleció el viernes 18 de septiembre de 2009, a los 89 años, por complicaciones pulmonares.

"Creo que su legado como fotógrafo es muy importante y que su obra constituye, tal vez, el acervo visual más rico sobre la historia de la última mitad de siglo con el que cuenta el país", comenta el crítico Eduardo Serrano.

Fue tal su pasión por la reportería gráfica, que prefirió siempre invertir todo su dinero en cámaras (deja un museo que supera las 100) antes que en una casa propia. "Siempre vivimos en arriendo", cuenta su hija Margarita.

Manuel H nació en el 14 de julio de 1920, en el tradicional barrio capitalino de San Diego. "Él me contaba —continúa relatando Margarita— que en el lugar donde nació había una placa que decía: 'Aquí nació Manuel H'. Y agregaba, con su humor único, 'es posible que no la encuentre porque algún envidioso se la llevó o algún admirador la tiene'".

Para ayudar a sus padres con el sustento de su casa, Manuel H se empleó, desde los 12 años, en la tipografía de su padrino Carlos, en donde se desempeñaba como mandadero. Por esa época, compró su primera cámara, con la que empezó a tomar fotos a amigos y familiares, mientras estudiaba por su propia cuenta con libros que conseguía.

Fue ese trabajo meticuloso en la tipografía de donde heredó la disciplina y organización con la que manejó el resto de la vida su valioso archivo, que supera las 500 mil fotografías en blanco y negro y las 200 mil en color, sin contar las trasparencias, puntualiza su hija.

No hubo político en Colombia que él no hubiera seguido, destaca Serrano. "Recuerdo mucho las fotos de Belisario toreando y de Laureano Gómez y Jorge Eliécer Gaitán viendo en toros. Él recopiló, visualmente, la historia política del país. Pero también fue el fotógrafo de la vida nacional. Muy recordados son sus trabajos de carácter social o sobre el desarrollo urbanístico de Bogotá".

Alternaba su trabajo de 'freelance' con las colaboraciones a diferentes diario y revistas nacionales, entre los que se destaca El Tiempo, al que se vinculó desde 1952.

Una de sus series más brillantes como reportero gráfico fue la del mundo taurino. "Como fotógrafo de toros no tiene igual no solo en Colombia, sino en América Latina. Sus trabajos de la fiesta brava son sencillamente espectaculares. Fotografió a Manolete, Dominguín, César Rincón y a todos los grandes", anota Serrano.

En 1943 se casó con a María Julia Rodríguez de Rodríguez, con quien compartió 62 años de vida. Le sobreviven ocho de sus diez hijos, 14 nietos y dos bisnietos.

El Tiempo, septiembre 19 de 2009.

Se marchó una señora periodista

Silvia Galvis, con sus nietos Mariana, Sofía y Sebastián. Foto Vanguardia Liberal.

BUCARAMANGA, Colombia, septiembre 20 de 2009. La periodista bumanguesa Silvia Galvis Ramírez, quien falleció a mediodía de este domingo 20 de septiembre, deja de herencia sus críticas y divertidas novelas, sus libros periodísticos de fondo y la memoria de una ocurrente y brillante columnista de opinión. Realizó investigaciones periodísticas para que no se nos olvidara la historia de dictadores y miserias del pasado y con su esposo, el gran periodista investigativo Alberto Donadío, escribió Colombia Nazi (1986) y El Jefe Supremo (1988), este último una reconstrucción descarnada de la dictadura de Rojas Pinilla, de mediados de los cincuenta.

También publicó reportajes sobre las vidas de ocho mujeres colombianas, Vida Mía (1994) e hizo el libro periodístico Los García Márquez que retrata a los personajes de la familia de Nobel con inmensa calidez (1996). Más tarde, en 2001, publicó De parte de los infieles, una recopilación de sus mejores columnas de opinión. Estas piezas inolvidables de periodismo que publicó en Vanguardia Liberal, el periódico de su familia; en El Espectador, su casa por muchos años y, luego, en la revista Cambio, marcaron historia por su estilo cargado de humor crítico. Sus frases lapidarias y cortantes, que parecían a veces divertidas exageraciones, retrataban la corrupción y la doble moral con toda realidad.

Sus novelas, siempre con una inmensa investigación histórica o periodística detrás, eran divertidas sátiras de la triste historia nacional, ultra liberales y blasfemas. ¡Viva Cristo Rey! (1991), Sabor a Mí (1995), Soledad (2002), La mujer que sabía demasiado (2006) y Un mal asunto, un manuscrito en imprenta que reconstruye el asesinato de la política Marta Catalina Daniels. Una vez, poco después de haber publicado Soledad, una reconstrucción minuciosa de la vida de la segunda esposa del ex presidente Rafael Núñez, Soledad Román de 888 páginas, le pregunté cómo andaba. Ella contestó burlona que, feliz, ¡cómo no iba a estarlo después de haber tenido 888 páginas para echar sátiras contra los curas y los godos! También publicó la obra de teatro De la caída de un ángel puro por culpa de un beso apasionado, en 1997, que fue llevada a escena unos años después.

El legado más importante de Silvia para sus colegas, sin embargo, no es ninguna de estas maravillosas obras. Su herencia es de valentía y verticalidad. La verticalidad que tuvo para denunciar los abusos de los militares y la corrupción de los políticos cuando dirigía la unidad investigativa de su diario; la valentía que demostró cuando asumió la dirección de Vanguardia, justo después de que una bomba del narcotráfico intentara callarlo. En estos tiempos de morales elásticas, Silvia no tranzó nunca, a riesgo de pasar por anticuada.

Cuando muchos se hacían los de la vista gorda frente a los abusivos y traficantes de influencia, los blandos que se acomodaban a cualquier ética pública con tal de mantenerse en el poder, quizás para no desentonar o quedar como un intenso, ella se mantenía firme como riel. No es que juzgara, sino que no hacía concesiones. La otra cara de la Sivia mordaz que no claudicaba ante la bobería nacional, heredera de las mejores costumbres santandereanas de ética y coraje, era una mujer dulce y una amiga incondicional.

En los últimos años había enfermado con un mal raro y difícil de diagnosticar, eso la llevó a enclaustrarse en su casa de Bucaramanga, a pasar el mayor tiempo posible con sus nietos a quienes adoraba, y con su familia. A riesgo de que Silvia, desde el otro mundo, se esté burlando de mí por convertirla en estandarte moral, quiero cerrar este homenaje a esa vida valiosa que se perdió este domingo con un apunte personal. Estoy triste porque perdí a una amiga entrañable, pero sobre todo me siento muy sola, porque Silvia siempre fue mi norte ético; ante las dudas que tenía, siempre pensaba cómo hubiera reaccionado ella; qué hubiera hecho o dicho, y trataba de emularla.

La verdadera “apóstol del periodismo” era ella. A Alberto, a Sebastián, a Alexandra y a sus hermanos, Hortensia, Cuco y Virgilio, un abrazo sentido en estos momentos desconsolados.
Por María Teresa Ronderos, Revista Semana, septiembre 20 de 2009.

jueves, 17 de septiembre de 2009

El drama de Adriana Arango

Para el periodismo y para su entorno familiar y social, el episodio sombrío y triste de los últimos meses fue protagonizado por la reconocida presentadora de TV Adriana Arango, a quien la justicia le revocó una medida de casa por cárcel y la envió a la prisión de El Buen Pastor, por los cargos de estafa y captación ilegal de dineros a través de un sistema de "pirámides". Foto Diario HOY.

BOGOTA, septiembre 28 de 2009. La historia de Adriana Arango es una fábula con moraleja según la cual, todo lo que es bello, en cualquier descuido, puede terminar en tragedia.

Su vida era casi perfecta. Tres hijos maravillosos, un esposo cariñoso, prestigio profesional, amigos que la adoraban y un negocio muy prometedor. Y de un día para otro el cuento de hadas se convirtió en uno de terror: se la llevaron a la cárcel de El Buen Pastor y aún hoy no ha encontrado la manera de explicarle a su hija de 6 años lo que le ha ocurrido. En un mes la juez dictará sentencia. Pero los presagios no parecen ser los mejores para Arango. El hecho de que le hayan cambiado la detención domiciliaria por cárcel indica que si la juez llega a condenarla le pondría una pena mayor a tres años de prisión.

No hay una amiga o compañera del colegio o de la universidad, con las que haya hablado Semana, que no diga lo mismo: “Lo que le pasó a Adriana nos pudo haber ocurrido a cualquiera de nosotras”. ¿Qué fue lo que pasó? ¿Cómo pudo tener este tropiezo una persona como ella con un recorrido de aplausos, de admiración y de reconocimientos?

Desde chiquita se destacó. Fue siempre la más aplicada en el Marymount de Medellín y aplicó la misma dosis en la facultad de comunicación social de la Universidad Pontificia Bolivariana. La mayoría de las veces ella se ganaba la beca que le daban al mejor estudiante de toda la carrera.

“Los cuadernos de Adriana estaban escritos con tanto cuidado que parecían hechos como para prestárselos a todo el mundo para fotocopiar”, dice uno de sus compañeros. “Le iba muy bien y sin hacer mayores esfuerzos”, añade uno de sus profesores. Y si a eso se le sumaba la alegría, el carisma y el empuje que desplegaba, Adriana se convertía en uno de aquellos seres entrañables.

Con tales antecedentes no se hizo extraño que se convirtiera en la primera paisa de una camada de presentadoras de exportación a noticieros de alcance nacional. Viajó a Bogotá con apenas 24 años no sólo para reemplazar a la vedette del momento, Margarita Rosa de Francisco, más conocida en ese entonces como la Niña Mencha, sino a compartir set con personajes del periodismo como Yamid Amat y María Isabel Rueda. Alguna vez contó cómo fue esa experiencia.

Llegó a la capital en mayo de 1988, justo el día que secuestraron al político conservador Álvaro Gómez, el papá del director del noticiero 24 Horas: “Estaba en pánico, me sudaban las manos, sentía que el corazón se me oía por el micrófono de lo rápido que me palpitaba, y parpadeaba como loca”.

En la primera mitad de la década de los 90, Adriana se convirtió en una de las periodistas más cotizadas de la televisión y marcó una época cuando hizo fórmula con María Elvira Arango en el noticiero 24 Horas. Por primera vez en el país dos mujeres presentaban noticias, y el fenómeno se volvió moda durante varios años. Después, Adriana marcó de nuevo la pauta cuando con un nuevo compañero de fórmula, Darío Restrepo, presentó En Vivo, un noticiero con tintes de magazín liviano que rompió el silencio de la televisión en las mañanas.

El negocio que hoy la tiene en la cárcel, comenzó en el año 2000. Con su segundo esposo, el administrador de empresas Javier Coy Troncoso, montó una comercializadora para exportar flores frescas y café.

En 2003 le comenzaron a inyectar más capital y en 2004 decidieron agrandar su negocio para encargarse ellos mismos de todas las partes del proceso, desde producir las flores –y para ello alquilaron tierras en la Sabana de Bogotá–, hasta venderlas en ciudades como Buenos Aires, Santiago, Londres, Nueva York y Moscú, y por eso abrieron oficinas en cada una de esas capitales.

El capital de la empresa empezó a crecer de 300 millones en 2004 a 2.400 millones en 2007. Buena parte era aportado por amigos y conocidos que les prestaban entre 30 y 500 millones de pesos a cambio de intereses de entre el 3 y el 5 por ciento. Pero en ese momento, y cuando parecían estarse convirtiendo en dos exitosos empresarios, algo comenzó a fallar. Se dieron unas terribles coincidencias.

Según explica Julio César Espíndola, el agente interventor que la Superintendencia Financiera designó para atender este caso, “poner oficinas en todas esas ciudades implicaba muchos gastos en licencias y otros costos jurídicos. Eso se da justo en 2006 ó 2007 cuando el dólar entró en crisis y cayó un 35 por ciento. Y esa crisis les hizo perder capital de trabajo importante”. Con esa debilidad en caja, empezaron a incumplir algunos pagos de intereses.

El mortífero rumor de que se estaban quedando sin fondos empezó a regarse y los acreedores, como una bola de nieve, empezaron a reclamar su dinero. Para ese momento, Adriana y su esposo habían cometido un único pecado, y era la captación ilegal de fondos. Hay una norma según la cual un particular no puede pedir prestado a más de 20 personas. Pero a decir verdad, este pecado es tan común en empresas del país que hasta ahora en la mayoría de los casos no tiene mayor repercusión.

Pero la mala suerte para Adriana y su esposo fue que su crisis coincidió con el escándalo de DMG que hizo temblar al gobierno nacional. Para tratar de menguar el impacto del derrumbe de la ‘pirámide’ de David Murcia, el presidente Álvaro Uribe expidió decretos de emergencia en los que le daba dientes a la Superintendencia para que pudiera intervenir a empresas captadoras. El negocio de Adriana y su esposo lejos estaba de ser una pirámide. Era un negocio lícito que captó dinero para apalancar recursos para su expansión.

La investigación misma dice que las tasas de interés, a diferencia de las ‘pirámides’ que hicieron su agosto el año pasado con intereses de hasta ciento por ciento, en el caso de Tango Trading no pasaban de 5 por ciento. Pero el hecho de que no fuera una ‘pirámide’ no sirvió de nada. En medio de las presiones, la Superintendencia utilizó sus nuevas herramientas jurídicas y decidió intervenir a los Coy Arango.

Los dos esposos trataron de encontrar un banquero internacional que les apalancara financieramente para responder a sus prestamistas, pero no lo lograron. En marzo, el agente interventor les quitó dos apartamentos, dos carros, los muebles de oficina, los electrodomésticos, y hasta vendió por 125 millones de pesos las matas de flores que tenían sembradas. La contabilidad final dice que los esposos recibieron préstamos por cerca de 16.800 millones de pesos de 218 personas. Devolvieron unos 5.000 millones y quedan deudas pendientes por 11.500 millones.

Por esa razón, la juez en la última audiencia, hace unos 10 días, decidió que estaban incursos en el delito de estafa agravada y por eso les quitó el beneficio de la casa por cárcel. Ese día, en los mismos medios en los que Adriana brillaba como una estrella en los años 90, aparecía ahora con una mirada triste y con esposas en sus muñecas. A la cárcel se le puede llamar. Contesta otra persona que la llama con un cariñoso “Adrianita”.

Ella, al darse cuenta de que al otro lado de la línea está un periodista, automáticamente dice que no puede hablar porque está pendiente de la audiencia del próximo 28 de octubre en donde la juez le impondrá la condena definitiva. Pero, en realidad, no quiere que su historia salga en ningún medio de comunicación, porque quiere proteger a sus hijos de 17, 12 y 6 años. En su tono de voz se nota una fortaleza y una tranquilidad sorprendente para la situación en que se encuentra. Quienes la conocen dicen que ella siempre ha sido una mujer muy fuerte. “Sin importar lo que pasara, a Adriana uno siempre la veía optimista. Y muy agradecida con Dios y con la vida”, dice una de sus amigas.

Y no es la primera vez que la vida le pone pruebas difíciles. Con decir que la artritis degenerativa, que cuando la ataca la deja casi paralizada, no ha sido el único de sus padecimientos. Cuando se la diagnosticaron, Adriana hizo acopio de toda su fuerza espiritual, se dedicó a la programación neurolingüística y logró cambiar sus hábitos para doblegar la enfermedad. Ahora, a sus 44 años, enfrenta en la cárcel el desafío más grande de su vida. Pero ella está convencida, dicen sus amigos, que de este también saldrá adelante.Añadir vídeo


Tomado de Revista Semana, septiembre 29 de 2009

miércoles, 26 de agosto de 2009

Dos ausencias en el periodismo

Lejos del agite y de la exposición mediática, dos periodistas de la que pudiera llamarse la vieja ola fallecieron durante la segunda semana de agosto de 2009. La intención de registrar aquí el doble acontecimiento luctuoso no es otra que la de honrar su memoria, como ejemplares dignos de exaltar por sus calidades como personas y como profesionales. Uno y otro encuadraban en aquello que los antepasados ya remotos solían denonimar "la gente decente".

Una de las dos ausencias corresponde al cronista y locutor deportivo Arith Rodríguez Lombana, fallecido el jueves 13 de agosto en Bogotá a los 69 años. Miembro de una generación prácticamente extinguida o en uso de buen retiro, Rodríguez, mejor conocido en su entorno familiar y social como Chirivico, fue uno de los pioneros de la radio en su proceso de modernización y evolución hacia los años 60 del ya siglo pasado.

Originario del Tolima, desde muy joven se instaló en Bogotá, donde laboró, entre otros frentes, en la Cadena Unión Radio, época y emisora de las cuales datan los inicios de otros veteranos del medio aún vigentes, como Hernán Peláez Restrepo (Caracol Radio) y Yamid Amat (CM&).

Miembro activo de la Asociación Colombiana de Cronistas Deportivos (ACORD), capítulo de Bogotá, Rodríguez Lombana fue reconocido entusiasta del deporte aficionado, en particular del fútbol, que impulsó hasta sus últimos días en la Cadena Todelar, en particular desde la Matinal Deportiva.

Su deceso sorprendió al medio periodístico deportivo, dados sus ponderados hábitos para el ejercicio físico, en el que algunas de sus especialidades favoritas eran el ciclismo y el fútbol mismo. Hincha del Deportes Tolima, que decía llevar en el corazón, era también seguidor del Santa Fe.

Su ausencia se suma a la de otros contertulios que entre 1975 y 1990 hicieron época en el palco del Círculo de Bogotá en el Estadio El Campín, como Ignacio Becerra Escobar, director del diario La República; Ricardo Esteban Sabogal (Agencia EFE y Caracol), Guillermo Fulleda Cárdenas (El Tiempo), Fabio Abella (Automóvil Club de Colombia) y Hernán Aristizábal López (Radio Súper).

Luis De Castro Rugeles

Uno de los periodistas judiciales más importantes y más reconocidos del país ya no escribirá más. El martes 11 de agosto a los 84 años, murió en Bogotá Luis de Castro Rugeles, quien por espacio de 40 años fue editor de las páginas judiciales de El Espectador y uno de los grandes exponentes de ese tipo de crónica.

De Castro llegó al periodismo con un debut poco común, pues al tener que cubrir el Bogotazo para El Liberal, el fotógrafo con el que estaba fue muerto de una bala perdida. A principios de los años 50 llegó a El Espectador y, entre otros, tuvo como colega de periodismo y bohemia a Gabriel García Márquez. Tras un paso por El Tiempo, regresó al diario de los Cano.

Estuvo al frente de la información el 6 y el 7 de noviembre de 1985, cuando la toma del M-19 al Palacio de Justicia. También hizo parte del equipo que a principios de los 80 destapó el escándalo del Grupo Grancolombiano. Ni De Castro ni sus jefes (los Cano) se arredraron ante el narcoterrorismo. Mucho menos cuando Pablo Escobar ordenó asesinar al director de El Espectador, Guillermo Cano, e hizo volar en pedazos las instalaciones del diario (1989).

En 1995 fue reconocido con el Premio a la Vida y Obra del Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB). En mayo de 1998, De Castro se retiró del periodismo activo y se fue a disfrutar su pensión a su casa del barrio Castilla. Desde ese momento no perdió oportunidad para narrarles a las nuevas generaciones sus anécdotas que, entre otras cosas, se contaban por miles. Hasta el último momento conservó su fino humor, su pasión por el fútbol y los toros, y su obsesión por el vestir impecable.

Revista Semana, edición 1424, agosto 17 a 24 de 2009.

jueves, 13 de agosto de 2009

Brutalidad chavista contra la prensa

Periodistas venezolanos reparten volantes a favor de la libertad de expresión hoy, 13 de agosto de 2009, en una céntrica avenida de Caracas. Doce de estos comunicadores resultaron heridos cuando fueron atacados por un grupo de presuntos afectos al Gobierno del presidente del país, Hugo Chávez. Fotos: Miguel Gutiérrez Gutiérrez/Cadena Capriles.

CARACAS, agosto 13 de 2009. (EFE). Doce periodistas venezolanos resultaron heridos hoy cuando repartían volantes a favor de la libertad de expresión en una céntrica avenida de Caracas y fueron atacados por un grupo de presuntos afectos al Gobierno de Hugo Chávez.

Marcos Ruiz, periodista del diario caraqueño Últimas Noticias, fue atacado por al menos cuatro sujetos, que le propinaron golpes con los puños y con palos, y fue trasladado de emergencia a un centro de salud, dijo a Efe su colega y testigo de los hechos Gledys Pastrana.

También resultaron con heridas en el cráneo Jesús Hurtado, periodista de diario El Mundo Economía, y su Gabriela Irribarren, redactora de Últimas Noticias, quien fue golpeada en la cara.
Los demás profesionales de la prensa, todos de diarios de la Cadena Capriles, resultaron con golpes en diversas partes del cuerpo, según lo relatado por Pastrana, quien también es periodista de ese grupo editorial.

La Cadena Capriles es una de las editoriales de prensa más importante del país, y publica los diarios caraqueños Últimas Noticias, El Mundo Economía y Negocios, y el diario deportivo Líder.

Pastrana explicó que los informadores fueron atacados por los presuntos oficialistas cuando repartían volantes a los conductores y transeúntes en la céntrica avenida Urdaneta de Caracas.

En las papeletas se señalaba un artículo del polémico proyecto de Ley Orgánica de Educación, actualmente en discusión parlamentaria para su aprobación, que penalizaría el ejercicio libre del periodismo, y se recogían consignas a favor de la libertad de expresión.

Los agresores llegaron al lugar gritando “revolución” y “esta calle es del pueblo”, y procedieron a golpear a los comunicadores, dijo Pastrana.

Fuimos a repartir volantes pacíficamente y fuimos salvajemente golpeados” por los presuntos oficialistas, que los acusaban de ser “defensores de la oligarquía”, añadió Ubaldo Arrieta, otro de los agredidos.

El presidente de la Cadena Capriles, Miguel Ángel Capriles, repudió el hecho de que, “en este caso” los periodistas de la empresa que él dirige “hayan sido agredidos de esta manera brutal”.

Este suceso “no es una demostración de respeto a los derechos humanos”, añadió Capriles en declaración a los medios locales.

Venezuela ha sido demandada en varias ocasiones por casos de ataques contra periodistas ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que ha ordenado sanciones al Estado y medidas de protección contra los afectados.

lunes, 3 de agosto de 2009

Silenciadas 34 emisoras en Venezuela

La amenaza de censura pende sobre otras 250 estaciones de radio y televisión

CARACAS, agosto 2 de 2009. "Es grato dirigirme a ustedes para notificarles que estarán fuera del aire", decía la nota enviada por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) a cada una de las 34 emisoras de radio que, por orden del Gobierno del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, fueron cerradas entre la noche del viernes y la madrugada de ayer, sábado.

Unas horas antes de recibir esta notificación, el presidente de Conatel y también ministro de Obras Públicas, Diosdado Cabello, había anunciado oficialmente el cierre inmediato de las estaciones, con el argumento de que no habrían renovado sus permisos de transmisión o habrían perdido sus concesiones por el fallecimiento de sus propietarios originales.

"Estas son las primeras 34 emisoras", dijo Cabello. "Cuando tomamos la decisión en el Gobierno nacional y revolucionario de democratizar el espectro radioeléctrico, de acabar con el latifundio mediático, lo estábamos diciendo en serio, no estábamos jugando".

Otras 250 emisoras -40 televisiones regionales y 210 estaciones de radio que han sido amenazadas por el Gobierno con el cierre por "tratar de lavarle el cerebro al pueblo venezolano"- serán las siguientes en la lista de concesiones y propiedades que en los próximos días podrían pasar también manos del Estado.

"Recibimos la instrucción del comandante [Chávez] de acabar con el latifundio radioeléctrico, el latifundio mediático, y lo vamos a hacer. (...) Si la oligarquía no cede en sus privilegios por las buenas, el pueblo la va a obligar por las malas. Y en este caso, en Venezuela el pueblo es el Gobierno", había dicho ya Cabello ante el Parlamento el 9 de julio.

En Venezuela, la radio llega a donde no lo hace la televisión. Suena en el campo, en las fábricas o en el autobús y es, sobre todo, el pueblo humilde el que la escucha. Según datos oficiales, de las 472 estaciones que operan en el país, 79 son propiedad del Estado y 243 son comunitarias. Entre estas, el 59% de transmiten en frecuencia modulada y el 51% restante, en onda media y forman parte de alguna cadena de radio. La más grande de todas pertenece al Estado: Radio Nacional de Venezuela, que agrupa a 73 emisoras.

Pero para la revolución chavista no parece ser suficiente, y sus dirigentes consideran que hace falta poner más emisoras en manos del pueblo. Para otorgarles más concesiones a las organizaciones comunitarias financiadas por el Ejecutivo hace falta quitárselas a los "privilegiados" que "desde los circuitos [cadenas] han intentado destrozar a la Revolución Bolivariana".

A las 7.30 de ayer sábado (dos de la tarde, hora peninsular española, Víctor Neda apagó para siempre los transmisores de la emisora CNB de Caracas, en la que trabajó como operador de cabina durante los últimos 19 años. El presidente del Colegio Nacional de Periodistas de Venezuela, William Echeverría, era el locutor de guardia dentro del estudio: "El policía del pensamiento, Hugo Chávez Frías, es el principal responsable de lo que ha pasado hoy", alcanzó a decir al aire antes de despedir las transmisiones con el himno nacional.

La cadena CNB agrupa a 10 emisoras de las cuales cinco fueron sacadas ayer del aire, y a través de su señal solía transmitirse, al mismo tiempo que el canal de noticias Globovisión, el programa de opinión Aló, Ciudadano, frontalmente crítico con la gestión gubernamental.

Vecinos, periodistas y dirigentes políticos de la oposición se agruparon ayer por la mañana en los alrededores de las emisoras cerradas en Caracas para protestar contra la medida.

Entre las estaciones de radio que aún siguen abiertas, ninguna se atrevió a transmitir en vivo los llamamientos de los vecinos para salir a manifestarse en las calles. Y las cadenas estatales, mientras tanto, transmitían dibujos animados, como lo hacían las emisoras hondureñas el día del golpe, o imágenes de archivo de la reciente visita a Caracas del ministro español de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

El País, Madrid, agosto 2 de 2009

sábado, 13 de junio de 2009

A. Latina: Libertad de prensa en vilo


WASHINGTON, junio 12 de 2009. (AP)— El Departamento de Estado expresó el viernes su "preocupación" por acciones recientes de algunos gobiernos de la región que afectan la libertad de expresión y el trabajo de la prensa independiente.

"Muchos de estos retos provienen de gobiernos que no aceptan las críticas", dijo el portavoz Ian Kelly en una declaración. "Otros proceden de organizaciones de narcotraficantes, carteles y otros actores no estatales que tratan de evitar que la prensa informe sobre sus actividades ilegales".

Kelly no identificó a país alguno en particular, pero en días recientes varios diarios estadounidenses, entre ellos The Washington Post, habían mencionado la violencia, hostigamiento e intimidación que la prensa independiente estaba encarando en Venezuela. Otros medios han informado también de asesinatos y secuestros de periodistas, incluyendo casos en Guatemala y Honduras.

"Una prensa independiente y libre es elemento vital de toda democracia y juega un rol crítico en la promoción de la prosperidad, seguridad y dignidad humana", dijo Kelly. La relatoría especial para la libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó esta semana el asesinato de Marco Antonio Barco Estrada, corresponsal del canal Telediario en Chiquimula, Guatemala.

La relatora Catalina Botero Marino pidió a las autoridades guatemaltecas investigar "este crimen de manera rápida y eficaz". Barco Estrada fue muerto a tiros el 6 de junio cuando se bajaba de su motocicleta. Reportero por más de 20 años, cubría información general para Telediario, lo que incluía información referida al crimen organizado y tráfico de drogas, dijo la CIDH.

Ha sido el segundo asesinato de un periodista en Guatemala en lo que va de 2009. En abril, Rolando Santiz, también reportero de televisión, fue asesinado a tiros en Ciudad de Guatemala cuando volvía de cubrir un acontecimiento policial.

El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), de Nueva York, elogió a su vez al Congreso uruguayo por la aprobación el miércoles de un proyecto de ley que despenaliza el delito de difamación en casos de interés público referido a funcionarios y elimina cláusulas de desacato. El proyecto está ahora bajo consideración del presidente Tabaré Vázquez.

Recordó que la reforma en Uruguay se produjo un mes después de que Brasil eliminó la Ley de Prensa de 1967 que imponía penas por calumnias e injurias. En abril de 2007, el presidente de México, Felipe Calderón, promulgó también una ley que eliminó definitivamente la injuria y calumnia del código penal a nivel federal, remitiendo las demandas relativas a estas causas a la jurisdicción civil.

viernes, 22 de mayo de 2009

Censura en "El Colombiano"

Sobre la salida de Javier Darío Restrepo
de ‘El Colombiano’
"Ayer (mayo 14 de 2009) en su columna semanal el periodista Javier Darío Restrepo anunció su salida del diario ‘El Colombiano’, de Medellín. Después de 17 años de escribir para ese medio de comunicación, la dirección le notificó la decisión argumentando que se trataba de una reorganización en las páginas de opinión. Para el periodista, esto se debe a que su ''visión de los hechos políticos'' no coincide con la del periódico.

La FLIP consultó a Restrepo, quien manifestó que desde hacía un tiempo venía haciendo críticas a la gestión del gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez y expresando su preocupación por la concentración de poder que implicaría una segunda reelección. Esta posición fue recogida en su penúltima columna, ‘Libertad de discrepar’: ''Hizo falta proclamar que discrepar de un gobierno no convierte a una persona en terrorista, ni en cómplice de las FARC, ni en enemigo del presidente o de sus fervientes seguidores'', afirmó haciendo alusión a las celebraciones del Día Mundial de la Libertad de Prensa.

En conversación con Radio Nacional de Colombia, Felipe Jaramillo, jefe de la página de Opinión de ‘El Colombiano’, afirmó que la salida de Javier Darío Restrepo se debió a un proceso normal de renovación de los columnistas de opinión que se viene dando desde hace tres años: ''Hace dos años cambiamos 27 columnistas; el año pasado, 21, y éste, doce''. Añadió que el periódico preserva todas las tendencias políticas, aun aquellas que están en desacuerdo con el gobierno.

Javier Darío Restrepo es autor de libros de periodismo y ética periodística; maestro de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano; miembro de Medios para la Paz, y fundador e integrante del consejo directivo de la FLIP.
* * *
La Fundación para la Libertad de Prensa reconoce y defiende la autonomía que tienen los medios de comunicación de seleccionar o despedir periodistas, columnistas o colaboradores, en los términos que lo contempla la ley. Este derecho está igualmente protegido por la libertad de expresión y el derecho a la información. No obstante, manifiesta su preocupación por el hecho de que estas decisiones puedan tener como propósito silenciar perspectivas críticas, diferentes o en contravía de la opinión mayoritaria. En la coyuntura actual de polarización y radicalismos, la democracia colombiana requiere más – y no menos – voces reflexivas como la del maestro Javier Darío Restrepo".

El nuevo Pallomari

Son demasiados "hechos aislados" como para creer que ocurrieron al azar. El capitán Lagos tiene claves para armar el rompecabezas.

Por DANIEL CORONEL, Revista Semana

La justicia colombiana y la comunidad internacional deben velar por la protección del ex jefe de Contrainteligencia del DAS, capitán Jorge Alberto Lagos, quien ha empezado a destapar el alcance de la guerra sucia adelantada desde esa entidad contra la Corte Suprema de Justicia, líderes de la oposición y periodistas.

Lagos y su familia son blancos obvios de quienes buscan ocultar el uso criminal y político que miembros del gobierno le han dado a las herramientas de inteligencia del Estado.Esta semana, Noticias RCN reveló que el capitán Lagos señaló ante la Fiscalía la identidad de algunos de los directos receptores de la información obtenida ilegalmente. Según su versión, él mismo le entregó reportes detallados de seguimientos al entonces consejero presidencial José Obdulio Gaviria; al secretario general de la Presidencia, Bernardo Moreno, y a otros dos asesores del Jefe de Estado.Unas horas antes de la revelación -en una impecable entrevista conducida por Vicky Dávila- la ex directora del DAS, María del Pilar Hurtado, admitió por primera vez que las investigaciones, sin orden judicial, a magistrados de la Corte Suprema nacieron de una inquietud del Presidente de la República.

Los eslabones inicial y final de la cadena están a la vista: los seguimientos ilegales surgieron de una preocupación del Presidente, y los informes -algunos de los cuales ignoraba la propia directora del DAS- fueron entregados a altos asesores del mandatario.Pero ahí no paran las coincidencias. Dentro del mismo plan, José Obdulio Gaviria filtró a medios de comunicación una fotografía en la que supuestamente aparecía el cuestionado empresario Ascencio Reyes en la posesión del fiscal Mario Iguarán. La conjura resultó deslucida porque el hombre que salía en la foto no era Reyes.

Las filtraciones eran parciales y sesgadas. Mientras trataban de poner en la picota a magistrados incómodos para el gobierno, soslayaban la información comprometedora de otros miembros de la rama judicial, considerados aliados incondicionales del Ejecutivo. Cuando todo esto se destape conoceremos, por ejemplo, las relaciones financieras entre Reyes y un tristemente célebre miembro del Consejo Superior de la Judicatura.Embriagados por el exceso de poder, altos funcionarios de la Presidencia se aliaron con la mafia para desprestigiar a la Corte Suprema de Justicia y a sus contradictores. Un resultado de esta asociación es la carta al Presidente de alias 'Tasmania' con la que el gobierno intentó desacreditar la investigación de la para-política.

'Tasmania' aclaró después que todo era un montaje contra el magistrado auxiliar Iván Velásquez. Detrás del plan estaban, según él, el abogado de alias el 'Tuso', el ex senador Mario Uribe y Santiago Uribe, el hermano del Presidente. La carta fue recogida por Martha Leal, alta funcionaria del DAS, por orden que Bernardo Moreno le diera a María del Pilar Hurtado.Otro tanto sucedió con las falsas retractaciones del hoy asesinado Francisco Villalba. La carta en la que retiraba señalamientos al Presidente por la masacre de El Aro resultó escrita por Chucho Sarria, el viudo de la 'Monita retrechera'. Mientras estuvo en la cárcel, Sarria tuvo contacto con el secretario jurídico de la Presidencia, Edmundo del Castillo, a través de una voluntaria llamada María Victoria Millán, compañera de grupo de oración del doctor Del Castillo. Y eso sin hablar de la reunión con 'Job', de la cual pronto se conocerán nuevos y reveladores antecedentes.Son demasiados "hechos aislados" como para creer que ocurrieron por azar. El capitán Lagos tiene claves para empezar a armar el rompecabezas.

P.D.: Después de 17 años desaparece de El Colombiano la columna de Javier Darío Restrepo. La vida y el trabajo de Javier Darío son el mejor ejemplo del buen periodismo. Sus opiniones, siempre lúcidas, han sido una guía constante en medio de las tinieblas del unanimismo.

Tomado de Revista Semana, mayo 21 de 2009.

viernes, 15 de mayo de 2009

El cuarto poder y sus malos precedentes


¿Qué leen los colombianos, espectadores y protagonistas de un país con el lastre histórico de una incorregible tradición de no lectura, fenómeno debido en gran medida al subdesarrollo ancestral, acentuado a su vez por factores como las deficiencias del modelo educativo y paradójicamente agravado por la misma revolución tecnológica, así como por la precariedad en los criterios y contenidos que en general ofrecen los medios de comunicación?

En el fragor de este convulso escenario cultural, social y político particularmente saturado de incógnitas y desafíos —según puede verse a la nación en su mayor encrucijada existencial— habrá que preguntarse entonces: ¿Qué tanto saben, qué esperan, que proyectan y qué piensan sobre sí mismos, sobre el país y sobre el devenir del mismo, y en particular las generaciones llamadas a protagonizarlo, a determinarlo y a conducirlo?

¿Hay una conciencia ética sobre hasta dónde son responsables los medios de comunicación —por algo reconocidos como el cuarto poder— del devenir histórico de un país? Por lo pronto, y aún sin tener que recurrir a los eruditos, ni consultar densos expedientes bibliográficos, ni siquiera a hacer un simple clic en la internet, sólo la experiencia y la Historia demuestran con creces cómo y cuánto el rol de los medios es una determinante histórica en la suerte de los pueblos.

El concepto sobre el cuarto poder fue acuñado por Edmund Burke (1729-1797), dando con ello una prueba casi profética de perspicacia política, ya que en su tiempo la prensa no había logrado —ni siquiera en Inglaterra— el extraordinario alcance que obtendría más tarde en todos los países libres.

Desde entonces, el cuarto poder designaba a la prensa, en alusión a la extraordinaria influencia que ésta ejercía en los años previos a la Revolución Francesa, concepto hoy aún mucho más fortalecido con el advenimiento de los todavía más poderosos medios de comunicación: la TV, el cable, la radio, internet, etc. De hecho, entre los agentes que mayormente influyen sobre la opinión son estos los más poderosos de todos, toda vez que dan o imponen su propio enfoque y criterio —errado o no — sobre la realidad y sobre el acontecer. Nada ni nadie como la prensa puede hacernos creer que es cierto, objetivo y correcto lo que informa.

Uno de los más protuberantes botones de muestra acerca de la perversa y nociva influencia que puede ejercer un medio de comunicación sobre el pensar, el sentir y el proceder colectivo se deriva de ciertos contenidos de opinión que ofrece la gran mayoría de ellos, entre los cuales —para efectos de darle alguna connotación al fenómeno— hemos escogido a uno de carácter impreso y sobre todo por su ascendencia y creciente circulación: el matutino gratuito ADN.

Tomado al azar el caso, he aquí cómo aquella gratuidad tiene su precio: Es flagrante el asunto de comunicadoras como Paola Villamarín, quien, a deducir por lo expuesto en sus columnas, no conoce rubor distinto del cosmético, según osa manifestar de modo tan descarnado y rampante buena parte de sus intimidades ante un público lector inerme, es decir, sin voz ni voto. Por cierto, una de las principales fortalezas —si no la mayor— de este joven rotativo se concentra en el enorme ingenio de Alejandro Rivas, el crucigramista, cuya propuesta, en cambio, sí constituye todo un reto a la imaginación y a la inteligencia, y de paso un loable aporte a la cultura a través del entretenimiento.

¿Qué especial interés a ras de opinión pública puede suscitar, por ejemplo, el hecho de que la columnista de Montería ande "buscando apartamento", como ha sido el tema central de una de sus recurrentes exposiciones personales? ¿Qué trascendencia —y de qué orden— pueden tener para el país pensante o trivial, las particulares veleidades que pueda afrontar o no la periodista en el contexto afectivo o familiar? Cosa bien distinta y pertinente son, verbi gratia, los avatares de la vida privada de los famosos, que son la esencia natural, el sentido y el objeto social y comercial del periodismo rosa. Ahora, ¿cuánta preponderancia hermenéutica, literaria, existencial, metafísica o cinematográfica puede resultar de su relato sobre la presencia de heces de pájaro en su domicilio, descubiertas cuando la columnista retornaba de vacaciones de tal o cuál lugar?

Incluso, muy al margen del periodismo, esta suerte de cosas eminentemente privadas que trascienden hacia el ámbito público implica enojosas situaciones en la vida cotidiana. Es el caso del común de los ciudadanos cuando residen en ciertos tipos de vivienda, lo cual suele conminarlos a tener que escuchar —patio, pared o techo de por medio— las bochornosas escenas del matrimonio vecino en conflicto, cuando no los gemidos y el crujir de los resortes del tálamo nupcial durante los tórridos reencuentros amorosos de la pareja en cuestión. De igual manera, ¿no es el estrépito que produce la descarga del sanitario ajeno una invasión al espacio propio? En el mismo sentido, ¿no es una imposición tener a la vista el tamaño, color y estado de la ropa interior colgada en la cuerda de un tan desidioso e implacable vecino?

Con fundadas razones, los dardos que por azar puedan estar cayendo hoy sobre el estilo de Paola Villamarín, mañana podrán llover sobre otra(o) exponente de esta expresión del periodismo. Esto ocurre cuando, para bien o para mal, se es una persona pública, y por lo tanto, cuando su imagen y su mensaje son, en consecuencia, del pleno dominio público.

Con el malhadado género de llevar a instancias públicas aquellos asuntos que deberían ser del fuero y de la absoluta reserva personal, la peor secuela y escuela no es sólo la irremediable banalización del periodismo, sino de una sociedad con uno de los más altos déficits de lectura en el planeta, y por lo tanto carente de los parámetros básicos de criterio y de juicio, indicadores de su propio subdesarrollo cultural, político y social. Es este, pues, un nefasto precedente en detrimento de las nuevas generaciones periodísticas, tan necesitadas de una verdadera capacitación, de una conciencia ética y mística, y hasta de una educación en modales y preceptos de estética, y además para que aprendan a diferenciar entre el buen y el mal gusto.

Por lo mismo, resulta imperativo cuestionar: ¿Qué rigor y credibilidad pueden derivarse de estas posturas y enfoques cuando la misma periodista tenga que asumir el manejo de un hecho en verdad relevante? ¿Con qué argumentos podrá enfrentar una circunstancia digna de poner a prueba su aptitud profesional? Porque, resulta evidente que la comunicadora —perteneciente a una especie bastante extendida en los medios— está moldeando su perfil como tal, y que a ese ritmo está inexorablemente encasillándose como ícono de lo superfluo, de lo banal, de lo vacuo, que es lo gratuito y lo común. Tanto para su caso como para el de muchos de sus colegas y compañeros de generación, no se requiere de mayor nivel de escolaridad y mucho menos aún de cinco años en la academia, con su respectivo postgrado. "Pasó por la universidad", suelen decir las señoras absortas ante casos como el presente, "pero la universidad no le entró".

Sin duda, el aspecto más sensible y más preocupante de la ausencia de sindéresis en los criterios y en los contenidos, con la consecuente la relajación desmesurada de las costumbres, por parte de un amplio sector de periodistas y de medios, está en irreversible efecto social que generan, cual es la cultura de la frivolización, de la superficialidad y de la desinformación a través de la promoción de los antivalores. "Dime qué lees y te diré quién eres", puede ser la nueva versión del viejo aforismo.

Mejor no puede sintetizar esta idea el aviso publicitario de "El Espectador" que encabeza esta entrada: "La fuerza de lo que dices a diario está en lo que lees a diario".

martes, 12 de mayo de 2009


Por qué NO a la reelección

El país se está deslizando gradualmente hacia una reforma constitucional que tendrá serias implicaciones institucionales: la segunda reelección del presidente Álvaro Uribe. En los próximos días, la Comisión de Conciliación del Senado y la Cámara llegará a un acuerdo sobre la modificación del texto original del referendo y con esto quedará el camino abierto para un tercer período del actual Presidente. Que esto sea casi un hecho cumplido nos obliga a analizar las consecuencias que tendrá esta medida.

La segunda reelección es mucho más grave que la primera. La anterior, a pesar de la controversia que suscitó, tenía cierta justificación política e institucional. Por un lado, se estaban obteniendo grandes avances en la guerra contra la subversión que ameritaban continuidad. Por otro, existía un consenso de que un período único de cuatro años era un plazo demasiado corto para culminar una obra de gobierno. Esta combinación de factores, jalonados por la popularidad de Álvaro Uribe, hizo posible que se rompiera el tabú que había existido en Colombia durante el siglo XX sobre los peligros de la reelección inmediata.

Una vez aprobada la reforma, Colombia quedó con un período presidencial de cuatro años con la posibilidad de una reelección para cuatro años adicionales. Esta fórmula, con sus virtudes y sus defectos, parece haber sido aceptada por el grueso de la opinión pública como un resultado de la evolución política del país, que lo deja a la par de algunas democracias anglosajonas.

La segunda reelección no tendrá ninguna de estas características. Las victorias militares contra la guerrilla se han venido consolidando y el gobierno de Álvaro Uribe no sólo llevó al conflicto armado a un punto de quiebre, sino que sentó las bases para que el proceso pueda llegar a una culminación en los próximos años. En contra de las visiones apocalípticas, varios de los aspirantes a reemplazar a Uribe tienen el talante y la capacidad para llevar a cabo esa misión. Y los que creen en fórmulas diferentes de ponerle un fin a la guerra se las presentarán al electorado para que sea este al que decida.

Así como había un consenso de que un gobierno de cuatro años era demasiado corto, también hay uno de que un período de 12 años es demasiado largo. El sistema de pesos y contrapesos para evitar arbitrariedades por parte de los mandatarios se constituyó en Colombia con base en un periodo presidencial de cuatro años. En el gobierno de la seguridad democrática esa estantería institucional se vino abajo y en la actualidad en el país sólo hay un poder: el ejecutivo. Un tercer gobierno consecutivo de Uribe sólo agravará el problema de la erosión que ha sufrido en estos siete años la separación de poderes, que es uno de los pilares fundamentales de cualquier democracia.

Los argumentos que se esgrimen a favor de la segunda reelección del Presidente son básicamente tres. 1) Que su candidatura es indispensable para mantener la gobernabilidad política del país y culminar su obra, porque, de lo contrario, se le desalinean sus tropas. 2) Que un tercer período es necesario para evitar que sus enemigos lo lleven ante algún tribunal nacional o internacional de justicia por supuestas violaciones de los derechos humanos, como le sucedió a Fujimori, 3) Que quiere ganar el referendo no para lanzarse a la reelección, sino para demostrarles a sus enemigos que fue por voluntad propia, y no de ellos, que no presentó su nombre.

Los tres argumentos carecen de validez. El de la gobernabilidad porque precisamente la razón por la cual está prácticamente paralizada la agenda legislativa y hay una incertidumbre política en el país es por la obsesión con el tema de la reelección. Por otra parte, tampoco habría mucha gobernabilidad en un tercer período de Uribe, pues el número de callos que ha pisado y de peleas que ha casado harían que desde el 7 de agosto de 2010 el país estuviera intensamente polarizado.

El segundo argumento, el de evitar los tribunales de justicia, tampoco tiene mucho fundamento. Advirtiendo que los dos casos no son comparables, basta decir que casi todos los observadores políticos coinciden en que Fujimori no estaría en la cárcel en la actualidad si no hubiera buscado su segunda reelección. La imagen de autócrata y la concentración de poder que produjo ese tercer período fueron parte clave de los elementos que desembocaron en su caída. Además, si bien durante el gobierno de Álvaro Uribe han tenido lugar excesos y aberraciones en materia de derechos humanos, no se le pueden atribuir en forma directa al Presidente de la República.

El último argumento es el más absurdo. La teoría detrás de este es que el Presidente quiere ganar el referendo no para presentarse después a la reelección, sino como un acto de vanidad política. De ser verdad esto, sería una irresponsabilidad histórica haber paralizado el país durante dos años para concentrar todas las energías nacionales en un referendo cuyo único propósito sería el de sacarse un clavo con sus adversarios.

Descartados los anteriores argumentos, el único factor razonable para justificar el tercer período es la popularidad del Presidente. Esta es innegable y probablemente merecida. Pero en los países políticamente desarrollados no se reforman las Constituciones en materia electoral por los resultados de las encuestas, y menos aun cuando el beneficiario de la reforma es el presidente de turno. Álvaro Uribe probablemente tiene como justificación el hecho de que sus homólogos contemporáneos, como Hugo Chávez, Rafael Correa y Evo Morales, están reformando sus respectivas Constituciones para durar más de una década en el poder. Pero estos son experimentos caudillistas inspirados en supuestas revoluciones socialistas o bolivarianas que no son precisamente ejemplos a seguir. Distinto al ejemplo de Lula quien, a pesar de su popularidad, ha dicho que no quiere cambiar las reglas del juego para perpetuarse en el poder.

La clase dirigente colombiana siempre se ha preciado de su tradición democrática y de no haber transitado el camino del populismo ni del caudillismo que recorrió América Latina durante el siglo pasado. En el país hay un establecimiento que defiende con convicción sus instituciones. Este ha sido en su gran mayoría uribista y considera que la obra de gobierno de los últimos ocho años ha transformado el país. El presidente Uribe desvirtuó el axioma de que ni el Ejército podía derrotar militarmente a la guerrilla, ni la guerrilla al Ejército. Hoy existe la percepción general de que el Estado está ganando la guerra.

Ese establecimiento uribista reconoce la dimensión histórica de este logro, pero en su gran mayoría considera que un tercer período presidencial es inconveniente. Todos los intelectuales y prácticamente todos los líderes de opinión están en contra; muchos empresarios que antes eran furibistas, ahora son tibios; La Iglesia Católica, por su parte, se ha pronunciado negativamente; el gobierno de Obama ha expresado abiertamente sus reservas. Y esto para no mencionar la oposición de la esposa del Presidente y de sus hijos.

Lo anterior no significa que el Presidente no cuente con apoyo popular. El respaldo del pueblo le permitiría probablemente un triunfo, pero difícilmente ya en primera vuelta. Las encuestas de Invamer Gallup demuestran que la imagen del Presidente ha perdido 17 puntos desde la Operación Jaque. Otros sondeos indican que mayorías electorales que bordeaban el 60 por ciento ahora están por debajo del 50. Con la recesión y el aumento del desempleo que se prevé para el final de este año es probable que esta cifra pueda disminuir aun más.

No deja de sorprender que el Presidente se le mida a una segunda reelección en esas circunstancias Para comenzar, el referendo desde su inicio tiene problemas de legitimidad. Enfrentará obstáculos en la Comisión de Conciliación, en el Consejo Nacional Electoral, en la Corte Constitucional y en las urnas. A esto se suma una serie de pequeñeces promovidas por el gobierno que para sus críticos son trucos de la aplanadora oficial para asegurar la reelección. En esta categoría están el intento fallido de cambiar el Registrador; la modificación de los textos de los referendos y la estrategia de unirlos en una sola fecha para que la gente salga a votar. No está probado que la razón de esas iniciativas sea la reelección del Presidente, pero un halo de preocupante sospecha ronda sus verdaderas intenciones.

Hacer malabarismos para perpetuarse en el poder es algo ajeno al talante del país y al del propio Presidente. Llama la atención que una persona de la dignidad, la inteligencia y la envergadura política de Álvaro Uribe se embarque en peligrosas aventuras caudillistas de esa naturaleza. La mayor prueba de que el tercer período de Uribe sería una reforma estrictamente personalista es que no existe un solo jurista o dirigente político en el país que no tenga la absoluta seguridad de que tan pronto el actual Presidente se retire del poder después de 12 años, se presentaría una contrarreforma para corregir ese exabrupto constitucional.

El argumento del Presidente para prolongar su mandato es que se necesita garantizar la continuidad de sus políticas para culminar su obra. Esto puede ser verdad, pero este gobierno al fin y al cabo no llega a su fin la semana entrante, sino el 7 de agosto del año 2010. Eso significa que faltan casi 16 meses. En ese plazo se pueden hacer muchas cosas.

Es evidente que la obsesión del presidente Álvaro Uribe es sacar adelante el país y evitar lo que él considera una hecatombe. Pero está olvidando que lo que saca realmente adelante a las naciones no son ni el ímpetu ni la buena voluntad de sus líderes, sino la fortaleza de sus instituciones.

Revista Semana, mayo 11 de 2009 - La caricatura es de Vladdo en Semana.

miércoles, 29 de abril de 2009

El ataque a Álvarez Gardeazábal

La libertad de prensa, el derecho a investigar e informar sin cortapisas ni presiones oficiales de ningún tipo, cualquiera sea la verdad que el periodista descubre y decide divulgar, nuevamente se ve asediada por la intimidación de los violentos.

Lo ocurrido el jueves de la semana pasada (abril 23 de 2009) en el municipio de Tuluá, departamento del Valle del Cauca, con el escritor y comentarista radial Gustavo Álvarez Gardeazábal, no puede más que provocar repudio e indignación. Y dudas, dada la presencia, según se ha dicho coincidencial, de miembros del Ejército en inmediaciones de la casa de Álvarez Gardeazábal justo en el momento en que seis hombres y una mujer irrumpieron por la fuerza, amenazaron con secuestrarlo y hurtaron tres computadores.

Tan pronto se conoció, a través de una cámara de seguridad revelada por la Dijín de la Policía, sobre la presencia de la camioneta del Ejército, el presidente Álvaro Uribe exigió explicaciones e hizo énfasis en que su gobierno está comprometido con la seguridad y “con los valores democráticos, que son inseparables”. El jefe de Inteligencia del Ejército en el Valle del Cauca, capitán Leonel Suescún, aseguró que la institución castrense no tiene ninguna responsabilidad en los hechos y que el vehículo detectado cumplía con una labor humanitaria: trasladar a un discapacitado a la Notaría Tercera, ubicada a 80 metros de la vivienda asaltada. El encargado de la camioneta, el sargento Hersaín Castillo, señaló que estamos ante “un acto de buena fe”. Gardeazábal, en tono de preocupación y no sin razón, calificó de “ridículas” y “precarias” las explicaciones y en entrevista para El Radar de Caracol Televisión hizo énfasis en que Policía y Ejército se contradicen en sus versiones.

A la espera de que las investigaciones avancen y se aclare por qué hombres del Ejército ocupan su tiempo y equipos en darles auxilio a los civiles en materias completamente ajenas a su función de proveedores de la seguridad —si a eso vamos, sería más sensato que fuese la Policía, y no el Ejército, la que le ayudase al campesino y su familia— y de que se defina sin lugar a dudas si existe alguna conducta impropia de parte de las fuerzas del orden, el lamentable episodio sigue siendo un ejemplo de intolerancia hacia quienes tienen por profesión la denuncia.

El controvertido escritor de más de un clásico de la literatura de la violencia de los años cincuenta se ha caracterizado por hablar sin temores ni eufemismos. En el último tiempo, en su labor periodística como comentador del programa La Luciérnaga, de Caracol Radio, se ha destacado por la preparación de sus intervenciones, en las que en más de una ocasión ha hecho explícitas las aparentes diferencias entre la Policía y el Ejército en su departamento. Por eso el ataque tiene todos los visos de ser un intento de los violentos para acallarlo. Que, entre otras, se suma al asesinato del periodista José Everardo Aguilar en El Bordo, Cauca, según todo lo indica en represalia por sus denuncias de corrupción administrativa en su programa de la cadena Súper.

Hace bien el Gobierno Nacional en declarar que las autoridades competentes se encargarán de la situación, pero razón tiene Álvarez Gardeazábal en manifestar su preocupación ante el ofrecimiento presidencial de una custodia especial de la que no dispuso anteriormente, pese a que ejerció como alcalde de Tuluá y gobernador del Valle. Mientras persistan las dudas, será válido preguntarse: ¿Se le protege o se le vigila?

Editorial de "El Espectador" de Bogotá, abril 28 de 2009.

CPB: Aunque la mazorca se desgrane...

Bastante coloquial podrá parecer esta analogía gráfica con el Círculo de Periodistas de Bogotá en materia de socios que permanecen o se marchan del CPB. Por supuesto, los granos aún en la mazorca simbolizan la suma de socios necesarios en las asambleas al momento de tomar determinaciones conducentes mucho más que a la propia supervivencia: a la estabilidad y al verdadero auge del organismo periodístico con mayor tradición en el país.

Según mis fuentes —¡no soy socia, y por ahora me resigno a ver los toros desde la barrera!— fue gracias a las gestiones de la junta directiva, mediante una fuerte ofensiva de comunicaciones y recordatorios para convocar a sus socios a la Asamblea Extraordinaria de Socios el pasado 25 de abril, como se logró reunir el quórum para deliberar y para contrarrestar el fenómeno del ausentismo que venía frustrando las convocatorias anteriores. Así, con empeño, ¡claro que se puede!

Aparte de otras deserciones que han venido ocurriendo, saltan a la vista ausencias no explicadas de socios que en el pasado ejercieron un rol y asumieron un compromiso en la junta, tales como los periodistas Raúl Gutiérrez y Amílkar Hernández, por una parte, y como Jorge Sánchez, quien, por razones de carácter estatutario que lo inhabilitaban, había renunciado a la dirección ejecutiva del CPB semanas atrás. Entre muchos otros, caso similar corresponde a la socia Nora Parra, cuyo aporte pudiera ser significativo, pero que aparte de sus cuestionamientos a la tarea de la actual junta, nunca ha formulado iniciativa que amplíe las expectativas de los socios en la suerte de la agremiación. Es así como ninguno de los anteriores ni siquiera se hizo representar, lo cual, por supuesto, no da lugar a mayores comentarios.

En el mismo sentido, otro hecho digno de olvidar fue la infortunada reaparición —después de muchas asambleas frustradas por el flagelo del ausentismo— del socio Hugo Sierra, cuya intervención estuvo orientada a desconocer le legitimidad de la figura de la delegación que hacen aquellos colegas que no pueden asistir y que se hacen representar por quienes sí pueden hacerlo, lo cual está claramente consagrado en los estatutos.

El propio Sierra argumentó que sus reiteradas ausencias constituían "una manera de protestar" contra la junta en ejercicio, y que en consecuencia se abstendría de ejercer el derecho a votar. En una actitud que describe al pie de la letra su ningún espíritu gremial, pero también —y para decirlo sin eufemismos— su manifiesta falta de carácter, el citado socio abandonó el recinto. Y como lo evidente no requiere demostraciones, cuando fue llamado a votar, el informe de tesorería reveló cómo Sierra se halla en larga mora con el pago de las cuotas trimestrales.

Por suerte, la asamblea deliberó dentro del marco de la convivencia general, adelantó parte de la reforma estatutaria y consiguió elegir a quienes ocuparán los cargos vacantes. Tras comprometerse con la causa, son ellos Wilson Acero, Carlos Piñeros y Ricardo Peláez. Al mismo tiempo, por unanimidad fue elegido fiscal el socio Mike Forero Nougués.

Sobre todo en coyunturas como la actual, enseña la experiencia que la calidad debe prevalecer siempre sobre la cantidad. Porque a partir de unos pocos granos fértiles es posible que el CPB pueda recuperarse y seguir adelante en sus propósitos. ¡Aunque la mazorca siga desgranándose!